La Médula Ósea
Los huesos no sólo sirven para sostener las partes blandas del cuerpo y facilitar sus movimientos.
Dentro, los huesos tienen un tejido denominado médula ósea. Las células que la componen tienen la función de fabricar, junto con el brazo y los ganglios linfáticos, los glóbulos rojos.
El organismo tiene entre 3.000 y 4.000 cm cúbicos de médula ósea. La parte productora de glóbulos es la médula roja ósea, que tiene unos 1.500 cm cúbicos.
La médula ósea fabrica diariamente 250.000 millones de plaquetas, 15.000 millones de glóbulos blancos y 500.000 millones de glóbulos rojos.
Los análisis sanguíneos permiten observar la cantidad de glóbulos rojos y blancos, además de detectar y combatir enfermedades como la anemia, la leucemia, el colesterol, entre otras.
De Bebé A Adulto
Hasta el sexto mes de embarazo, los glóbulos rojos del bebé se forman en la médula ósea y en el hígado. A partir del sexto mes, sólo se producen en la médula roja de los huesos largos.
Desde los 20 años de edad, los glóbulos se crean en la médula del esternón, en las vértebras y en las costillas. Después de madurar en el interior del hueso, los glóbulos rojos pasan a la sangre y se destruyen en el hígado o en el brazo.
Datos Importantes
Los Glóbulos Rojos
Los glóbulos rojos están formados por una proteína llamada hemoglobina (globina + hematina). La globina es una proteína. La hematina le da a la sangre ese característico color rojo y la propiedad para captar el oxígeno y transferirlo al resto de las células del cuerpo.
En un litro de sangre hay 140-160 g de hemoglobina, que puede transportar unos 200 cm cúbicos de oxígeno a las células.
Los hombres tienen alrededor de 5 millones de glóbulos rojos/mm cúbicos y las mujeres entre 4 y 5 millones.
Anemia
El buen estado, fabricación y composición de la sangre asegura una parte de la salud del cuerpo, porque es la encargada de nutrirlo y oxigenarlo. Cuando la cantidad de hemoglobina disminuye, se produce una enfermedad típica: la anemia. Esta enfermedad puede ser provocada por una alimentación con poco hierro y pocas vitaminas.
Cuando una persona esta anémica, se pone pálida, puede tener vértigos y mareos, cansancio, problemas visuales, falta de concentración, pérdida del hambre debido al bajo porcentaje de hemoglobina en la sangre. Cuando esto ocurre, el organismo trata de compensar esta carencia acelerando la circulación de la sangre, lo que provoca a su vez un incremento de los ritmos cardíacos y respiratorios.